Arte nuevo para criar seda

La presente edición facsimilar, realizada con el aprovechamiento de los ricos fondos de la Universidad de Granada, es una empresa singular. Se trata de resucitar, a través del túnel del tiempo, una obra única que respondía perfectamente a las necesidades agronómicas de la época y que, incluso, la trascendió, pues fue reproducida en su completo contenido en varias ediciones posteriores. Podemos decir, no incurriendo en error notorio, que el interés por este trabajo se extendió al menos durante los siglos XVI, XVII y XVIII Luego, en los siglos contemporáneos vendría la depuración de varios de los autores del libro completo, aparentemente por anacronismos con la modernidad, hasta el día de hoy, en que vuelve a surgir con toda la fuerza de la cultura tradicional gracias al amparo y cuidado del Alma Mater granadina. Es preciso felicitar a la Universidad granadina por haber podido preservar durante los últimos 375 años una obra de tamaña valía e interés bibliográfico (HERRERA, 1620).

El estudio preliminar que introduce al lector por las inteligentes páginas de su contenido ha partido de la premisa de sin abandonar una caracterización breve, pero suficiente, de la obra total aplicarse a un autor y un tratado determinado, y ello por una consideración de profesionalidad. Este historiador pertenece al gremio americanista, y desde ya algo lejanos días marcó este destino que ahora retoma (GARRIDO, 1979: 3). En efecto, la parte seleccionada de Geopónicos españoles antiguos corresponde a GONZALO DE LAS CASAS y a su Arte nuevo para criar la seda, un autor y una obra muy reducidos.