La Universidad de Granada

De cualquier referencia a una institución docente —y más si ésta es granadina y se esboza en 1526 cuando se está configurando la nueva sociedad— emergen cuestiones interesantes.

La Universidad de Granada se inserta en un pasado y se proyecta en el futuro, sólida e incluso optimista frente a lo conseguido y ante el quehacer apasionante que ambiciona. Los documentos fundacionales contribuyen a perfilar las circunstancias que propiciaron su fundación. En general, todas las instituciones docentes granadinas responden a la voluntad real en colaboración con la iglesia.